Aprovechando que el fin de semana pasado era largo, nos fuimos de paseo por el norte del país, a visitar la segunda ciudad más grande, o sea, Hamburgo, que mucha gente nos había recomendado. La ciudad en sí constituye una provincia o Bundesland, posiblemente por tradición de los tiempos de las ciudades-estado. El rio Elba es la arteria principal de la ciudad; a la vez la separa (el lado norte es residencial y el lado sur netamente portuario/industrial), y la comunica (numerosos canales atraviesan el casco antiguo)
El edificio principal de la ciudad es el Ayuntamiento, edificio de 1897 que sobrevivió de milagro los bombardeos de la Segunda Guerra. (Cayó una bomba en la plaza, pero no detonó - el detonador está enmarcado dentro del edificio). Se puede visitar por dentro, cosa que hicimos. Es más un palacio que un edificio gubernamental, así que Nuri estaba en su salsa, ya pensando en postularse para un cargo estatal.
Otra de las visitas imperdibles es la fantástica Chile-haus, magnífico exponente de arquitectura expresionista, de cuya existencia nos habíamos enterado en la expo en Darmstadt. En la planta baja hay varios negocios y cafés. También nos pudimos asomar en un hall de entrada, aunque no parecía haber departamentos amueblados según la época para visitar, parecen ser todos departamentos privados. Creo que sería un golazo si lo hicieran (tipo la Pedrera).
El último día estuvimos paseando por Hafen-city. Estuvimos tentados de llamarla la Puerto Madero del Norte, pero al poco tiempo nos dimos cuenta que es más apropiado llamar a Puerto Madero el Hafen-city del Sur; el tamaño y la arquitectura de los docks reconvertidos es verdaderamente otra escala. En su frente está aún en construcción el edificio de la Elbephilarmonie, un edificio loco no exento de polémica, ya que es la típica obra faraónica que se termina pasando varias veces de su presupuesto. Ahora bien, tiene pinta de convertirse en un verdadero símbolo de la ciudad, ya que aún en construcción atrae a mucha gente.
Por último queda por mencionar la estela de los Beatles en la zona roja de Sankt Pauli. Queda poco más que el recuerdo de sus pasos inciales por la ciudad. Un par de los clubes donde tocaron un par de veces aún funcionan como tales, lo demás son cabarets. Para fanes como uno vale la pena la visita al recientemente inaugurado museo de la Beatlemanía, donde se pueden ver fotos, carteles y documentos de la época, así como videos en plan documental. Después entre muchas otras tonterías como ser merchandising ridículo de todo tipo y color había otras cosas muy buenas como ser dibujos originales de yellow submarine, o el cartel que inspiró Being for the Benefit of Mr. Kite (entre otros...)
El centro de la ciudad desde el Binnenalster
El edificio principal de la ciudad es el Ayuntamiento, edificio de 1897 que sobrevivió de milagro los bombardeos de la Segunda Guerra. (Cayó una bomba en la plaza, pero no detonó - el detonador está enmarcado dentro del edificio). Se puede visitar por dentro, cosa que hicimos. Es más un palacio que un edificio gubernamental, así que Nuri estaba en su salsa, ya pensando en postularse para un cargo estatal.
El frente del Ayuntamiento desde la plaza Rathausmarkt.
Otra de las visitas imperdibles es la fantástica Chile-haus, magnífico exponente de arquitectura expresionista, de cuya existencia nos habíamos enterado en la expo en Darmstadt. En la planta baja hay varios negocios y cafés. También nos pudimos asomar en un hall de entrada, aunque no parecía haber departamentos amueblados según la época para visitar, parecen ser todos departamentos privados. Creo que sería un golazo si lo hicieran (tipo la Pedrera).
La vista de la Chile-haus engaña con unos ángulos imposiblemente agudos.
El último día estuvimos paseando por Hafen-city. Estuvimos tentados de llamarla la Puerto Madero del Norte, pero al poco tiempo nos dimos cuenta que es más apropiado llamar a Puerto Madero el Hafen-city del Sur; el tamaño y la arquitectura de los docks reconvertidos es verdaderamente otra escala. En su frente está aún en construcción el edificio de la Elbephilarmonie, un edificio loco no exento de polémica, ya que es la típica obra faraónica que se termina pasando varias veces de su presupuesto. Ahora bien, tiene pinta de convertirse en un verdadero símbolo de la ciudad, ya que aún en construcción atrae a mucha gente.
La Elbephilarmonie en construcción
Antiguos depósitos aduaneros en Hafen-city
Por último queda por mencionar la estela de los Beatles en la zona roja de Sankt Pauli. Queda poco más que el recuerdo de sus pasos inciales por la ciudad. Un par de los clubes donde tocaron un par de veces aún funcionan como tales, lo demás son cabarets. Para fanes como uno vale la pena la visita al recientemente inaugurado museo de la Beatlemanía, donde se pueden ver fotos, carteles y documentos de la época, así como videos en plan documental. Después entre muchas otras tonterías como ser merchandising ridículo de todo tipo y color había otras cosas muy buenas como ser dibujos originales de yellow submarine, o el cartel que inspiró Being for the Benefit of Mr. Kite (entre otros...)
La Beatles-Platz en Sankt Pauli
Cartel anunciando alguno de los primeros conciertos en el Kaiserkeller.
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2 comentarios:
Parece que Hamburgo merece un par de días. Muy interesante la casa Chile, por qué el nombre? Me la imagino a Nuri recorriendo los salones palaciegos. No tenía idea de un pasado de los Beatles en Hamburgo.
El tipo que encargó el edificio vivió muchos años en Chile, y fue también donde hizo fortuna
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