miércoles, marzo 11, 2009
Aida
AIDA grand march - Verdi
El domingo fuimos nuevamente a la ópera de Nürnberg a ver la puesta de Aida de Giuseppe Verdi.
El elenco en la ocasión, compuesto de:
Mardi Byers (Aida, princesa etiope, soprano)
Vladislav Solodyagin (Rey de Egipto, bajo)
Jordanka Milkova (Amneris, hija del Rey, mezzo soprano)
Mikolaj Zalasinski (Amonasro, rey de Etiopía y padre de Aida, barítono)
David Yim (Radames, jefe del ejército, tenor)
Nicolai Karnolsky (Ramphis, jefe religioso, bajo)
Dirección musical: Guido Johannes Rumstadt
Escenografía: Jens-Daniel Herzog
Debo decir que aunque fue agradable ver la ópera, no cumplió con mis expectativas. Para comenzar el traslado temporal a un Egipto en los años... 40(?)... la escenografía de Herzog no me resultó nada convincente. En alguna ocasión hemos visto traslados de este tipo que me resultaron bien (si no recuerdo mal una puesta de Wozzec en el Liceu?), pero en este caso no sólo se pierde mucha de la gracia, sino que las invocaciones a Isis y el desarrollo general no se corresponde con lo que se ve.
La dupla Byers-Yim tenía cero química, ella destacó un poco más. Él cumplió pero hasta ahí. El physique du rol no le ayuda tampoco, petiso y barrigón haciendo de galán (Aunque de jefes de ejército, si uno se acuerda de Napoleón...)
Me pareció bien Milkova, con convincente actuación de mujer despechada. Karnolsky hizo lo que pudo por salvar un rol que en la relocación temporal queda descafeinado. El que brilló en voz y actuación fue Zalasinski como Amonasro. Solodyagin completó muy discretamente.
A pesar de todo hubo buenos momentos rescatables... Aida en Ritorna vincitor! fue uno de los momentos más convincentes de Byers, con un escenario algo perturbador pero que ciertamente queda grabado en la memoria.
El segundo acto fue el mejor, bueno el dueto inicial (Fu la sorte dell'armi) entre Amneris y Aida, seguido de la gran marcha a la llegada triunfal de Radamés. (Retorcido pero muy efectivo: las trompetas persiguiendo a una Aida atormentada).
En el tercer acto Byers y Zalasinski entregan posiblemente el momento de mejor química en el duetto entre Aida y Amonasro (Ciel, mio padre!)
También fue interesante el toque de soledad extra en el final (Morir! sì pura e bella!), donde Radamés está sólo y a Aida la intuimos en un recinto/tumba paralelo.
En definitiva fue una puesta con momentos buenos pero que no cumplió con mis expectativas. Esta vez, aunque arriba, tuvimos buena visión, aunque los asientos son extremadamente cortos, lo cual a quien escribe no le hace ninguna gracia.
Las fotos no son mías, son de la web de la ópera de Nürnberg y las reproduzco con fines divulgativos.
Etiquetas:
música
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2 comentarios:
No es por petiso ni por regordete: el que hacía de Radamés simplemente tenía menos onda q un Mondrian.
100% de acuerdo q el mejor, lejos, fue Amonasro.
Aida estaba bien, pero tal vez demasiado en pobrecita, y la puesta no la ayudó. Amneris mejor en la parte actuación, y sacó unos vestidos divinos.
Qué raro esa Aída en una especie de hospital o cárcel, como parece en las fotos! Fotos de vestidos divinos no ví. El elenco es híper eslavo, se te debían trabar los dedos al copiar los nombres. El Herzog de la puesta en escena será pariente de Werner, o es un apellido común?
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