Además del paseo por Corfú capital, decidimos alquilar un coche por un par de días para recorrer un poco la isla.
El primer día empezamos para ver el Achilleion, uno de los puntos más visitados de la isla. Fue construido a fines del siglo XIX para la emperatriz Sissi; luego de su asesinato pasó a manos del Kaiser Wilhelm II a principios del siglo XX.
Después subimos hacia el norte bordeando la costa por una de las pocas "rutas" dignas de denominarse de tal modo. Primero el paisaje es bastante plano, pero llegando al extremo norte se vuelve más rocoso y las largas playas de arena son reemplazadas por pequeñas calas. Paramos en Kalami, un pueblo de pescadores donde vivió un tiempo el escritor Lawrence Durrell. Precisamente en la que fuera su casa por un tiempo, la Casa Blanca, paramos para almorzar -yo, pez espada, que estaba muy bien-. Hicimos sobremesa larga a la sombra dejando pasar las peores horas de sol y calor antes de retomar la marcha.
La siguiente parada fue en la laguna de Andiniotissa, descrita por Gerald Durrell, el hermano naturalista de Lawrence, en uno de los capitulos de su My family and other animals (que apropiadamente fue mi lectura durante nuestra estadía en la isla). No vimos buenas opciones para explorar mucho; pronto seguimos camino, no sin antes sacar una foto a las montañas albanesas (en esa zona de la isla la distancia entre isla y continente es mínima)
Nos alejamos luego del camino costero para subir hasta el semi abandonado pueblo de Paleo Perithia. El que fuera la primera población de la isla está bastante en ruinas. De todos modos hay un par de tavernas. Hicimos una pequeña pausa con café y torta bajo la sombra.
Retomamos luego la ruta costera hasta llegar a Sidari. Allí pasamos el resto de la tarde en la playa. El lugar es muy pintoresco por las formas rocosas erosionadas por el agua. De ahi ya emprendimos la vuelta.
El martes el paseo no fue tan extenso. Por la mañana subimos un poco hacia el norte hasta la playa de Myrthiótissa; pero para el almuerzo volvimos a Agios Gordios e hicimos una siesta.
Por la tarde fuimos un poco hacia el sur, pasamos por las ruinas del castillo de Gardiki, una construcción del siglo XIII, antes de llegar a las dunas de la laguna Korission. Una angosta lengua de arena separa la laguna del mar; aunque hay algún chiringuito y algo de gente, las playas son largas y desoladas. Tenía elegido el lugar para poder disfrutar un poco del cielo nocturno con mayor oscuridad. Después de cenar Souflaki en una fonda casera volvimos a la playa, donde pude hacer algunas fotos.
Dos dias de recorrido por la isla. Lunes 19.07 en rojo y martes 20.07 en azul.
El primer día empezamos para ver el Achilleion, uno de los puntos más visitados de la isla. Fue construido a fines del siglo XIX para la emperatriz Sissi; luego de su asesinato pasó a manos del Kaiser Wilhelm II a principios del siglo XX.
El Achilleion, palacio donde vivió Sissi
Después subimos hacia el norte bordeando la costa por una de las pocas "rutas" dignas de denominarse de tal modo. Primero el paisaje es bastante plano, pero llegando al extremo norte se vuelve más rocoso y las largas playas de arena son reemplazadas por pequeñas calas. Paramos en Kalami, un pueblo de pescadores donde vivió un tiempo el escritor Lawrence Durrell. Precisamente en la que fuera su casa por un tiempo, la Casa Blanca, paramos para almorzar -yo, pez espada, que estaba muy bien-. Hicimos sobremesa larga a la sombra dejando pasar las peores horas de sol y calor antes de retomar la marcha.
En el pequeño pueblo pesquero de Kalami
La siguiente parada fue en la laguna de Andiniotissa, descrita por Gerald Durrell, el hermano naturalista de Lawrence, en uno de los capitulos de su My family and other animals (que apropiadamente fue mi lectura durante nuestra estadía en la isla). No vimos buenas opciones para explorar mucho; pronto seguimos camino, no sin antes sacar una foto a las montañas albanesas (en esa zona de la isla la distancia entre isla y continente es mínima)
Laguna de Andiniotissa, en el extremo nordeste de la isla
Nos alejamos luego del camino costero para subir hasta el semi abandonado pueblo de Paleo Perithia. El que fuera la primera población de la isla está bastante en ruinas. De todos modos hay un par de tavernas. Hicimos una pequeña pausa con café y torta bajo la sombra.
Las ruinas de Paleo Perithia
Retomamos luego la ruta costera hasta llegar a Sidari. Allí pasamos el resto de la tarde en la playa. El lugar es muy pintoresco por las formas rocosas erosionadas por el agua. De ahi ya emprendimos la vuelta.
Canal d'amour en Sidari
El martes el paseo no fue tan extenso. Por la mañana subimos un poco hacia el norte hasta la playa de Myrthiótissa; pero para el almuerzo volvimos a Agios Gordios e hicimos una siesta.
Ruinas de Gardiki
Por la tarde fuimos un poco hacia el sur, pasamos por las ruinas del castillo de Gardiki, una construcción del siglo XIII, antes de llegar a las dunas de la laguna Korission. Una angosta lengua de arena separa la laguna del mar; aunque hay algún chiringuito y algo de gente, las playas son largas y desoladas. Tenía elegido el lugar para poder disfrutar un poco del cielo nocturno con mayor oscuridad. Después de cenar Souflaki en una fonda casera volvimos a la playa, donde pude hacer algunas fotos.
La laguna Korission está separada de la playa por unas angostas dunas.
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3 comentarios:
Me encantaría recorrer esa isla, tiene muchas opciones por lo que contás. Hasta palacio de Sissi, qué variedad. Creo que bien valía la pena verla en su totalidad.
Igna: No dejas de sorprenderme por la amplitud de tu conocimiento la precisión de tu escritos y la amplitud y variedad de los temas que planteas.
Realmente admirable y envidiable (sanamente).
Grande Igna!
Roberto.
Corfú es, por lo que muestran, una isla que da para pasar una semana de puta madre, con playas paradisíacas, cielo despejado, mucha historia, la residencia de Sissi de la que habíamos escuchado hablar en Viena y otros rincones seguramente mencionados en el libro de Durrell.
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